domingo, agosto 31, 2008
lunes, marzo 31, 2008
En relacion a la efemérides de mañana, una vieja y buena letra del catalán:
Joan Manuel Serrat
Album: Bienaventurados
"Llegar a viejo"
Si se llevasen el miedo
y nos dejasen lo bailado
para enfrentar el presente.
Si se llegase entrenado
y con ánimo suficiente.
Y después de darlo todo
-en justa correspondencia-
todo estuviese pagado
y el carné de jubilado
abriese todas las puertas.
Quizás llegar a viejo
sería más llevadero,
más confortable
más duradero.
Si el ayer no se olvidase tan aprisa.
Si tuviesen más cuidado en donde pisan.
Si se viviese entre amigos
que al menos de vez en cuando
pasasen una pelota.
Si el cansancio y la derrota
no supiesen tan amargo.
Si fuesen poniendo luces
en el camino, a medida
que el corazón se acobarda
y los ángeles de la guarda
diesen señales de vida.
Quizás llegar a viejo
sería más razonable,
más apacible
más transitable.
Si la veteraní fuese un grado.
Si no se llegase huérfano a ese trago.
Si tuviese más ventajas
y menos inconvenientes.
Si el alma se apasionase,
el cuerpo se alborotase
y las piernas respondiesen.
Y del pedazo de cielo
reservado para cuando
toca entregar el equipo,
repartiesen anticipos
a los más necesitados.
Quizás llegar a viejo
sería todo un progreso,
un buen remate
un final con beso.
En lugar de arrinconarlos en la historia
convertidos en fantasmas con memoria.
Si no estuviese tan oscuro
a la vuelta de la esquina.
O simplemente si todos
entendiésemos que todos
llevamos un viejo encima.
Joan Manuel Serrat
Album: Bienaventurados
"Llegar a viejo"
Si se llevasen el miedo
y nos dejasen lo bailado
para enfrentar el presente.
Si se llegase entrenado
y con ánimo suficiente.
Y después de darlo todo
-en justa correspondencia-
todo estuviese pagado
y el carné de jubilado
abriese todas las puertas.
Quizás llegar a viejo
sería más llevadero,
más confortable
más duradero.
Si el ayer no se olvidase tan aprisa.
Si tuviesen más cuidado en donde pisan.
Si se viviese entre amigos
que al menos de vez en cuando
pasasen una pelota.
Si el cansancio y la derrota
no supiesen tan amargo.
Si fuesen poniendo luces
en el camino, a medida
que el corazón se acobarda
y los ángeles de la guarda
diesen señales de vida.
Quizás llegar a viejo
sería más razonable,
más apacible
más transitable.
Si la veteraní fuese un grado.
Si no se llegase huérfano a ese trago.
Si tuviese más ventajas
y menos inconvenientes.
Si el alma se apasionase,
el cuerpo se alborotase
y las piernas respondiesen.
Y del pedazo de cielo
reservado para cuando
toca entregar el equipo,
repartiesen anticipos
a los más necesitados.
Quizás llegar a viejo
sería todo un progreso,
un buen remate
un final con beso.
En lugar de arrinconarlos en la historia
convertidos en fantasmas con memoria.
Si no estuviese tan oscuro
a la vuelta de la esquina.
O simplemente si todos
entendiésemos que todos
llevamos un viejo encima.
viernes, febrero 01, 2008
La vida no vale nada
(Pablo Milanés)
La vida no vale nada
si no es para perecer
porque otros puedan tener
lo que uno disfruta y ama.
La vida no vale nada
si yo me quedo sentado
después que he visto y soñado
que en todas partes me llaman.
La vida no vale nada
cuando otros se están matando
y yo sigo aquí cantando
cual si no pasara nada.
La vida no vale nada
si escucho un grito mortal
y no es capaz de tocar
mi corazón que se apaga.
La vida no vale nada
si ignoro que el asesino
cogió por otro camino
y prepara otra celada.
La vida no vale nada
si se sorprende a mi hermano
cuando supe de antemano
lo que se le preparaba.
La vida no vale nada
si cuatro caen por minuto
y al final por el abuso
se decide la jornada.
La vida no vale nada
si tengo que posponer
otro minuto de ser
y morirme en una cama.
La vida no vale nada
si, en fin, lo que me rodea
no puedo cambiar cual fuera
lo que tengo y que me ampara.
Y por eso, para mí,
la vida no vale nada.
(Pablo Milanés)
La vida no vale nada
si no es para perecer
porque otros puedan tener
lo que uno disfruta y ama.
La vida no vale nada
si yo me quedo sentado
después que he visto y soñado
que en todas partes me llaman.
La vida no vale nada
cuando otros se están matando
y yo sigo aquí cantando
cual si no pasara nada.
La vida no vale nada
si escucho un grito mortal
y no es capaz de tocar
mi corazón que se apaga.
La vida no vale nada
si ignoro que el asesino
cogió por otro camino
y prepara otra celada.
La vida no vale nada
si se sorprende a mi hermano
cuando supe de antemano
lo que se le preparaba.
La vida no vale nada
si cuatro caen por minuto
y al final por el abuso
se decide la jornada.
La vida no vale nada
si tengo que posponer
otro minuto de ser
y morirme en una cama.
La vida no vale nada
si, en fin, lo que me rodea
no puedo cambiar cual fuera
lo que tengo y que me ampara.
Y por eso, para mí,
la vida no vale nada.